Mi máscara

En esta ocasión la profesora nos dijo que debíamos traer para la siguiente clase una venda llamada gypsona para hacer nuestras mascaras también otros materiales que serían necesarios para la máscara. Llego la siguiente clase y nos juntamos en parejas, yo escogí una compañera con la que anteriormente ya había hecho grupo. Nos pusimos de acuerdo en que material traería cada una.

Así llego el día esperado, la profesora nos dio indicaciones de como debíamos hacer la máscara, primero escogimos quien empezaba primero, en mi caso yo empecé primero así que me eche en la toalla y mi compañera empezó a cortar pedazos de venda de acuerdo al tamaño de mi cara, luego me echo vaselina por toda la cara para que de esa forma cuando me pusiera la venda esta no se me quedara pegada. Ahora era momento de mojar la venda y ponérmela, así lo hizo pero ocurrió algo inesperado, el yeso de la venda no corría, por lo tanto no iba a funcionar. La profesora se dio cuenta de lo sucedido, nos dimos cuenta que la venda no era gypsona, pues la venda la había comprado la tía de mi compañera que al parecer se había confundido de marca. Por suerte un compañero nos prestó un poco de su venda, que nos fue de mucha ayuda para poder continuar con el proceso.

Una vez que ya tenía toda la venda puesta, esta empezó a ponerse cada vez más dura, se sentía extraño pero si podía respirar porque se dejaron dos agujeros para que pudiera hacerlo. Mi compañera me echaba aire con un libro hasta que al cabo de unos minutos quedo lista, solo faltaba quitármela, mi compañera llamo a la profesora y ella me ayudo a sacármela, pero una parte de la venda se había quedado muy pegada a mi cara, esto se solucionó echándome mas vaselina. Mi mascara quedo perfecta, tenía la misma forma de mi cara, era impactante, la deje encima de una silla y era mi turno para ayudar a mi compañera con la máscara, era la primera vez que le iba a hacer una mascara a alguien y esperaba que me saliese bien. Seguí el mismo procedimiento pero esta vez ya teníamos más experiencia, así termine de hacer la máscara de mi compañera que quedo alucinante. Los demás también iban acabando. La profesora nos dijo que para la siguiente clase debíamos llevarla decorada a nuestro gusto. Después nos fuimos al baño a lavarnos la cara de vaselina.

Cuando llegue a mi casa me puse a pensar de qué forma quería que fuese mi mascara, busque en internet diseños de mascara, yo quería que fuese elegante, de fiesta e impactante. Encontré un modelo que tenía lo que quería así que lo hice de esa manera pero le faltaba algo más, yo quería que brillara así que le eche escarcha por todos lados y quedo muy bonita. Llego el día en que todos debíamos enseñar nuestras mascaras decoradas, nos juntamos en grupos y empezamos a describirlas, todas eran sorprendentes, le habían agregado colores y añadido cosas a su estilo, luego mostramos nuestras mascaras a los demás y así pudimos ver todas, cada una tenía su toque propio que la hacía especial.